¿Cómo nació mi inspiración?
Llegó como un susurro, como la luz que tiembla detrás de unos párpados cerrados. Al principio no supe qué era; solo sentí un cosquilleo en los dedos, una urgencia en el pecho, un murmullo en mi mente. Era como si muchas imágenes revolotearan sueltas por los márgenes de mis pensamientos. Pronto, aquellas sombras tomaron forma y reclamaron nombres. Así nació mi inspiración, en los rincones donde las historias duermen, a la espera de ser despertadas. Reconocí su presencia cuando las palabras comenzaron a palpitar. Surgían de una frase, de una mirada entre la multitud, de un recuerdo que nunca sabré si realmente es mío. ...